El día a día del estudiante.

[Vanessa Sanchez]

Para lograr superar los obstáculos de la vida se requiere de esfuerzos y sacrificios en el diario vivir, siendo esta la situación que viven día a día muchos jóvenes que deciden trabajar y estudiar a la misma vez, enfrentándose con muchos limitantes que se ponen en su camino a si es el caso de Beatriz Hernández.

Lunes 5:00 AM empieza su día con el sonido de la alarma con alto volumen y adormitada logra apagarla y antes de levantarse piensa en todas las cosas que tiene que realizar en su día y el sueño de superarse hace que se levante con ánimos de seguir adelante, con rapidez se mete abañarse para que el tiempo no la pueda absorber el reloj marca las 5:14 ya listo su uniforme de trabajo se viste y prepara sus cuadernos de apuntes de la Universidad.

Con mucha precisión logra prepararse un café para elevar sus energías, luego se dirige hacia la parada de autobuses ya va contra el reloj y a lo lejos logra ver el autobús que estaba estacionado esperando que las personas lo abordaran, Beatriz se dispone a caminar con ligereza para que no la deje, y agiliza el paso para lograr llegar, lo aborda observando que va repleto de personas que como ella va a sus destinos con un propósito que es salir adelante.

En  el trayecto de llegar a la universidad va pensando en las cosas que tiene pendientes en realizar y de pronto se percata que el autobús de manera considerable baja la velocidad y como siempre el trafico está a la orden del día  con preocupación observa su reloj que marcan 5:55 la angustia la empieza a invadir porque sabe que el tiempo que lleva no es el indicado para lograr llegar a la clase de las 6:30 como un alivio empieza a avanzar el tráfico con lentitud pero ya es algo de consuelo.

Ya falta muy poco para llegar a su destino pero lamentablemente el reloj marcaba las 6:35 la mente la empieza a invadir con muchos pensamientos si al entrar a la clase le llamarán la atención o el catedrático simplemente no la dejara entrar ya que el Licenciado es muy estricto, pero a su vez sabe que no perderá nada con intentarlo.

Luego de una larga espera por fin llega a la Universidad caminando rápidamente casi corriendo dirigiéndose  a su salón entra con cautela para no interrumpir la clase, de repente el Licenciado le lanza una mirada como diciendo ya es muy tarde pero no le dice nada, luego de que ya había pasado lo temido saca sus cuadernos para tomas apuntes de lo que ya habían impartido el docente y así trascurrió el tiempo y el reloj volvió hacer el protagonista de la historia ya le daba la indicación que tenía que retirarse porque se acercaba la hora de ir a su trabajo.

Con mucha cautela guarda sus cuadernos cuando son 7:40  se levanta de su pupitre con su vista directa a la puerta de reojos logra ver la mirada del Licenciado  como diciendo viene tarde y se va temprano, pero no le queda de otra que retirarse, dirigiéndose de nuevo a la parada de autobuses que la llevarían a su lugar de trabajo.

Luego observa que se aproxima un autobús y le hace la parada se sube rápidamente y logra sentarse y vuelen a invadirla sus pensamientos de todos los pendientes que tiene tanto en el estudio como el trabajo pero el optimismo, es algo que uno no suelta por nada del mundo, en tanto pensar se le fue el tiempo con rapidez y se percata que ya falta poco para llegar a su trabajo y por suerte no se encontró de nuevo con el trafico fastidioso, con precisión se levanta de su asiento porque en la próxima parada se tiene  que bajar,  llega a su parada  y con precisión empieza a caminar para que el tiempo no la alcance más de lo que ya lo había hecho.

Llegando a su lugar de trabajo saluda a las personas que se encuentra regalándoles unos buenos días para comenzar las labores del día, y la misma vez empiezan a recordarle los pendientes que ha dejado y que tiene que terminar en el trascurso de la del día.
Así trascurre el resto de su mañana, luego el reloj indica 12:00 MD que es su espacio de su almuerzo que le saca provecho para solventar un poco las tareas que tiene en la universidad a la vez se toma diez minutos como un soldado aplicado para que le alcance el tiempo.

Después de un breve descanso que se da, vuelve a sus labores y sigue con todos sus pendientes para poder cumplir con su trabajo correctamente ya que es el que le permite que ella pueda estudiar llevando de la mano su estudio y trabajo.
Esto es un poco del día a día y de los obstáculos que se les  presentan a los estudiantes que deciden superarse haciendo un doble esfuerzo para lograr encontrar la satisfacción del el éxito que buscan en sus vidas ya que el sufrimiento solo es pasajero ya que todo el esfuerzo que están realizando se convertirá en frutos y esta historia solo será una buena anécdota para contarla y poder decir que si se pude alcanzar las metas propuestas.

[Cortesía de Beatriz Menjivar]

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